Avantasia en Palacio de Vistalegre (Madrid, 27/04/2019)

Tras casi hacer triplete de sold out en España, Avantasia, el supergrupo de power metal sinfónico liderado por Tobias Sammet, ha hecho historia en Madrid, llegando a congregar a cerca de 5.000 fieles en un Vistalegre lleno hasta la bandera.

Y es que no es de extrañar que el señor Sammet con su metal opera esté coleccionando sold outs en esta gira presentando su nuevo álbum Moonglow. Tras haber llenado La Riviera por dos noches consecutivas en su última visita a la capital, ahora tocaba el turno de apostar a lo grande, un espacio que diera cabida a la gran demanda de entradas para esta gira. En detrimento, apostar por un espacio tan grande tiene su precio, y en este caso, el sonido tuvo que pagar un precio, pero no tan alto como el que tuvo que pagar Tobias por una cerveza. Aunque cuando lleguemos a ese río, hablaremos de ese puente.

En esta visita, el elenco de artistas que ha acompañado a Tobi ha variado ligeramente con respecto a la gira anterior y hemos visto bajas muy notables como Michael Kiske y Amanda Somerville. Para intentar suplirlas, hemos contado con nuevas voces como las de Adrienne Cowan o la de Ina Morgan, que para mi gusto, han hecho lo que han podido para intentar cubrir a estos dos grandes magnánimos. Aunque lo cortés no quita lo valiente, he de admitir que en otros registros han sonado brillantes.

Tobias sabe muy bien con quien juntarse y a quién traer, además no escatima en voces o músicos cuando de calidad suprema se trata. A las voces teníamos nada más ni nada menos que a Ronnie Atkins, Jørn Lande, Geoff Tate, Eric Martin y Bob Catley. Los coros corrían a cargo de Adrienne, Ina y Herbie Langhans. Sascha Paeth y Oliver Hartman a las guitarras acompañados de Felix Bohnke a las baquetas y Miro Rodenberg a los teclados.

Si los alemanes tienen una fama, es la de ser puntuales y a las 21:00 empezó a sonar You Shook me all Night Long de AC/DC que nos hizo salivar sabiendo lo que se nos avecinaba. A las 21:05 sonó la 9ª Sinfonía de Beethoven, que dió el pistoletazo de salida a lo que se anunciaba a bombo y platillo como uno de los mejores conciertos del año.

¡Bom! Telón abajo, ya teníamos ganas de ver cómo era el escenario en esta gira. Avantasia, con este último disco, nos mete de lleno en una atmósfera cargada de ambientes, representada por una composición escénica bastante modesta para mi gusto. Ésta estaba basada en la portada del Moonglow: unos árboles con farolillos de ramas distorsionadas junto con una barandilla del mismo estilo acompañaban a la gran pantalla de fondo, en la que se fueron mostrando distintos elementos representativos de cada álbum según correspondiese a lo largo del espectáculo.


Como no podía ser de otro modo, los primeros temas que abrieron el concierto iban a formar parte de este último trabajo y Ghost in the Moon fue la que rompió el hielo con ese brillo lunar, lo que hizo las delicias del público que ya tenía ganas de ponerse a gritar como loco. Tobias, cual rey, apareció en lo alto de la plataforma y aunque en esta canción no contó con ningún invitado, no cantó solo, ya que el público le acompañó hasta la última nota de este maravilloso corte.

Con Starlight tuvimos la primera aparición estelar de Ronnie Atkins. ¡Qué barbaridad! ¡Qué desparpajo y qué voz que todavía me sigue trayendo el señor Atkins! Seguimos con él en Book of Shallows y con Adrienne que dejó momentáneamente ese segundo plano coral para defender en directo la parte vocal de Mille Petrozza. Aquí Adrienne se salió, me encantó sin duda. Sí señor, todo un acierto.

Después llegaba el turno de lo que se puede considerar un anti-singleen toda regla. Como bien explicó Tobi, compuso esta canción aun sabiendo que muchas de las radios se la iban a echar para atrás por pasar de los 3 minutos. No solo dura 12 minutos, sino que ha estado encabezando las listas de éxitos de las principales radios europeas. The Raven Child se abría con esa intro a laúd, ¡madre mía!, lo que se nos venía encima con esa canción. Si hubiera aparecido Hansi, habría sido una fantástica sorpresa con esa estrofa que finaliza con ese ‘There is no glory on the last journey home… ohhh…’. Si algo no se puede poner en duda es la capacidad del señor Sammet para liderar un concierto y al público. Por fin llegó el momento, el esperado momento, rugido del público al ver aparecer en lo alto de la plataforma a Jørn. Los pelos como escarpias al oirle cantar en esta canción. Sin duda, fue un subidón. El nórdico nos acompañaría en Lucifer, una balada a cargo del gran Miro al piano con una ambientación más íntima y triste.


Cambiando de tercio en lo que a las voces se refiere, salió a escena el ex líder vocal de Queensrÿche, Geoff Tate, con una voz espectacular, contundente y soberbia con la que nos acompañó en Alchemy y Invincible. Hasta incluso el propio Tobias gritaba: The f*cking Geoff Tate!! Y es que llevaba más razón que un santo y Geoff nos ofreció una clase maestra sobre las tablas. No todo iban a ser solo halagos a las voces y en aquel caso, cabía hacer mención especial a Sasha, alma mater de Avantasia, con un increíble solo de guitarra.

Seguíamos avanzando en el concierto y eran las 22:00 cuando sonaba Reach out for the Light del álbum The Metal Opera, en el que por fin, sonaba un sonido más power metal, de esos que te incitan a partirte el cuello moviendo el pelo con el doble bombo inicial y quedarte afónico acompañando a Tobias en ese grito atronador. Oliver cogía el relevo a la voz junto con Ina. Sin duda, fue una canción para volverse loco de la emoción. Ya tenía ganas de que empezaran a salir temas más antiguos.

Todo llega a quien sabe esperar y sucedió uno de los momentazos cómicos de la noche. Tobias, todo un frontman con desparpajo y naturalidad, le pidió una cerveza a un birra-man que pasaba por la primera fila, con tan mala suerte de que los 5 euros que llevaba encima no eran suficientes para pagar el mini de 10 euros y tuvo que ir a backstage para poder pagar la cerveza de la discordia. Le faltó tiempo para poner el grito en el cielo por el abuso de tener que pagar ese precio por una cerveza: Ten f*cking euros for a beer? Estoy segura, de que se va a acordar de esa cerveza y de esos 10 euros el resto de su vida.

Se abría paso el último single Moonglowy Tobias seguía sin salir de su asombro por el robo a mano armada que acababa de sufrir por esa cerveza. Adrienne salió de los coros para interpretar esta canción, que para mi gusto la resolvió bastante bien con una actuación más que aprobada. No podía faltar la famosa versión de Maniac de Michael Sambello, que sería la próxima que volvería locos a todos los presentes. Todo un sobresaliente con Eric Martin a las voces, aunque hubiera brillado más si su micro no hubiera estado tan bajo. Y pasábamos con él también a otra obra maestra con Dying for an Angel, un tema que el público ya conocía bastante bien y así demostró, y que de nuevo rememoraba esos tiempos pretéritos del álbum The Scarecrow, discazo donde los haya.


Llegaba el momento de bajar las pulsaciones un poco y dábamos la bienvenida a Bob Catley, todo un profesional de los pies a la cabeza sobre el escenario por el que no pasan los años con una interpretación impecable y elegante en Lavender. Sin duda, este hombre sabe llevar bien la batuta en las masas y, con su buen hacer, nos bendice eternamente en todas sus actuaciones.The Story ain’t Overcontó además con Ina para los coros y culminó en uno de los momentos álgidos de la noche. Avantasia se ganaba a pulso la primera gran ovación de la noche.

No, desde luego que ahí no se acababa la historia, The Scarecrow era el siguiente trallazo en sonar, y es que aquello era un no parar de temazos. El que la sigue la consigue, y nuestro alemán favorito, al que no le cuesta dedicar algunas palabras a su público, explicó cómo hace varios años le costaba encontrar un promotor que confiara en el proyecto de Avantasia. Pero al final encontró a uno que los trajo a España y ahora más de uno se puede comer sus palabras porque Avantasia está haciendo sold outs por toda Europa. Tras esta canción, el germano se tomó un descanso sabiendo que dejaba el escenario en muy buenas manos. Le cedió el testigo a Jørn y Eric que defendieron a muerte Promised Land. Para Twisted Mind, Geoff reemplazó al vikingo y, junto al cantante de Mr. Big, consiguieron que aquel momento se convirtiera en algo mágico, potente y brutal. Una de mis favoritas de la noche.

A las 23:00 se cumplían ya dos horas redondas de concierto, y nada más lejos de acabarse el espectáculo, lo normal que hubiera ocurrido en cualquier otro concierto, como bien apuntó el frontman, todavía a este hombre le quedaba cuerda, energía y cañonazos para rato. Entrábamos en el último tercio de la noche con Avantasia y Tobias hacía su aparición acompañando a Geoff. Todo un himno que acabó con la segunda gran ovación de la noche. Aprovechando el subidón, Tobi guiaba al público con Let the Storm Descend upon You, un tema en el que colaboraron Jørn y Atkins. Otra obra maestra sobre las tablas con la que el público disfrutó de las delicias de esas dos poderosas y desgarradoras voces. Potente dueto vocal allá donde los haya. El nórdico se retiró para dar paso a la siguiente canción, Master of the Pendulum, con un Tobias y un Atkins supremos. Tic, toc, tic, toc el público no paraba de cantar los coros.

La siguiente en caer fue Shelter from the Rain y para este corte contamos con un trío de lujo a las voces con Bob, Herbie e Ina. Herbie salía por primera vez del plano coral para tomar más protagonismo en la línea vocal. Este sería el último tema de la batería de dinamita que Avantasia nos tenía guardado en la recámara. Eché de menos temas como Draconian Love y a un Herbie mejor aprovechado a lo largo de todo el concierto. El señor Catley, se quedó con Tobias para acompañarlo en Mystery of a Blood Red Rose, una canción que ya iba anunciando a gritos el final del concierto. Lost in Space, un tema ya más rebajado que los anteriores, cerraba el último capítulo antes de llegar a los bises.

Tras una breve espera, los primeros acordes de Farewell empezaron a sonar y un mar de brazos inundó el Vistalegre. Visto desde las gradas, aquello era todo un espectáculo digno de ver. Adrienne hizo en esta canción las funciones de Amanda y aquí sí que se notó el vacío de esta. Eran las 00:00 cuando Tobias presentaba a la banda y poco a poco todos los músicos fueron apareciendo en el escenario para cantar el medley Sign of the Cross/The Seven Angels y cerrar esta fantasía a golpe de lluvia de confeti.


Tres horas y diez minutos de show non-stop, que lejos de hacerse pesadas, se pasaron volando. Avantasia cerró su gira por España con tres grandísimas ovaciones, la coronación del Vistalegre, el anuncio de que volverán este verano al Leyendas del Rock y la promesa de que no volverían a tocar en un sitio con una cerveza tan cara.

Setlist completo de Avantasia:
1. [Intro] Symphony No. 9
2. Ghost in the Moon
3. Starlight (Ronnie Atkins)
4. Book of Shallows (Ronnie Atkins y Adrienne Cowan)
5. The Raven Child (Jørn Lande)
6. Lucifer (Jørn Lande)
7. Alchemy (Geoff Tate)
8. Invincible (Geoff Tate)
9. Reach out for the Light (Oliver Hartmann)
10. Moonglow (Adrienne Cowan)
11. Maniac (Eric Martin)
12. Dying for an Angel (Eric Martin)
13. Lavender (Bob Catley)
14. The Story ain’t Over (Bob Catley)
15. The Scarecrow (Jørn Lande)
16. Promised Land (Jørn Lande y Eric Martin sin Tobias Sammet)
17. Twisted Mind (Geoff Tate y Eric Martin sin Tobias Sammet)
18. Avantasia (Geoff Tate)
19. Let the Storm Descend upon You (Jørn Lande y Ronnie Atkins)
20. Master of the Pendulum (Ronnie Atkins)
21. Shelter from the Rain (Bob Catley, Herbie Langhans e Ina Morgan)
22. Mystery of a Blood Red Rose (Bob Catley)
23. Lost in Space
[BIS]
24. Farewell (Adrienne Cowan)
25. Sign of the Cross/The Seven Angels (todos)

Crónica: Maria del Carmen Tajuelo Fotos: Óscar Gil Escobar.